naranja Arare

Nuestra tierra es zona de citricos, forman parte de nuestra cultura, historia y gastronomía. Tan importantes son, que se ha estudiado su genética, sí, has leído bien, el ADN de los citricos. Desde, Arare empresa de naranjas , te contamos que se acaba de realizar una investigación que reconstruye la evolución de los citricos desde hace ocho millones de años.

Como primer dato curioso decirte que la secuenciación del genoma de los citricos analizados (mandarino común, naranjo dulce, zamboa, clementina) ha permitido conocer que las naranjas proceden de cruces entre zamboas y mandarinas. O que las clementinas (la variedad de mandarina más comercializada) son el resultado del naranjo dulce y el mandarino común.

El estudio del genoma de las mandarinas, las naranjas y las zamboas (pomelo salvaje) ha permitido reconstruir la genealogía de las actuales variedades de los citricos con unos resultados sorprendentes. Por un lado, describe un proceso evolutivo extraordinariamente complejo. Por otro, ha hecho posible estimar cuándo el ancestro común a todas estas especies, la madre de todas las naranjas, se diversificó, primero en dos grandes grupos (unas mandarinas ancestrales y en un enorme pomelo primitivo) y, más adelante, en la enorme variedad de productos (y muchos más) que han llegado a los estantes de las fruterías actuales.

Todos estos hallazgos los describe un equipo internacional integrado por medio centenar de investigadores en un artículo que publica Nature Biothecnology y en el que participan científicos del Instituto Valenciano de Investigadores Agrarias (IVIA).

Todo comenzó hace unos 8 millones de años cuando en la tierra había un único tipo de citricos. Probablemente, a raíz de un proceso de aislamiento físico –semillas que se trasladaron accidentalmente al otro lado de una cordillera o de un gran río- una población de esta especie siguió unas pautas evolutivas distintas, una escisión que se prolongó hace entre siete y seis millones de años, y que dio lugar a dos especies diferenciadas: las mandarinas originarias y las zamboas.

La abundante información genética recabada ha permitido reconstruir el origen de los citricos comerciales actuales, un rompecabezas que arranca de los cruces entre estas dos especies. Las mezclas entre híbridos, y de híbridos con las especies primitivas de mandarinas y zamboas, son las que dan lugar a las variedades de mandarinas, naranjas y pomelos que conocemos en la actualidad.

Desde Arare creemos que es muy interesante que se investigue sobre este tema. Y a ti, ¿te parece interesante conocer el ADN de los citricos?