Cualquier valenciano al que se le pregunte qué naranja es la mejor proclamará rápidamente y sin dudar que la naranja de Valencia. Lo cierto es que la larga historia de vida de las naranjas en esta región hacen de ella un lugar reconocido por la riqueza de sus naranjas.
Las mandarinas son una de las frutas preferidas de los más pequeños tanto por su sabor dulce y refrescante como por sus propiedades nutritivas. Lo cierto es que durante varias generaciones la mandarina ha sido una fruta que ha poblado los patios de los colegios de todo un país.
¿Quién tuvo la idea de comercializar las naranjas de Valencia? ¿Dónde se localizan las primeras plantaciones de naranjas en nuestra comunidad? ¿Cuándo surgieron los primeros exportadores de naranjas? ¿Hasta qué punto ha influido la naranja y la citricultura en la vida popular y social de los valencianos? Hoy dedicamos un post a algunos de los hitos relacionados con las naranjas de Valencia y su cultivo. Algunas de estas historias y anécdotas son muy curiosas.
La Lane Late es una variedad de naranjas Navel (es decir, con “ombligo”) procedente de Australia. Tradicionalmente se ha considerado como una mutación de la Washington Navel americana, al igual que las Navelinas. En España comenzó a comercializarse en los años 80, y debido a su gran demanda y a su facilidad de producción, comenzó a cultivarse también aquí.
Además de por enorme sabor y por sus propiedades nutritivas, las naranjas de Valencia tienen usos que probablemente no imaginarías. Uno de ellos está relacionado también con la salud, aunque en este caso no es la tuya sino la de tu hogar. A continuación vamos a darte algunos consejos para utilizar las naranjas como producto de limpieza de lo más efectivo. No pienses que al hacerlo estás “desaprovechando” unas deliciosas naranjas de Valencia: en la mayoría de los casos lo que se utiliza es la cáscara o esas mitades de fruta que se quedan huérfanas por el camino y que normalmente desechamos.
Las naranjas más famosas son las de la familia Navel, que destaca sobre otras por su carnosidad y su sabor dulce y refrescante. Su tamaño suele ser bastante grande, su piel fina y fácil de pelar, y apenas tienen petitas, por lo que se convierte en la naranja de mesa perfecta.
Por mucho que las referencias populares nos indiquen la validez de las cajas de huevos para insonorizar habitaciones o locales de ensayo para nuestra banda estamos ante un mito: los cartones de huevos sirven para guardar, almacenar o transportar huevos pero no como aislante acústico. Sin embargo, existen otros materiales reciclados que sí que pueden servir para este propósito. ¿Un ejemplo? Los restos de poda de naranjos, que ayudan a producir un aislante ecológico y menos contaminante que los actuales y que puede producir mejoras de hasta un 150%.
Cortan, exprimen y tiran las cáscaras a un contenedor… todos sabemos de que estamos hablando ¿verdad? Exprimidores de naranja que lucen tan espléndidos detrás de las barras de los bares y que hacen incluso mágico el momento en el que el zumo de naranja cae en una jarra.
Una vez que nos ha llegado nuestra caja de naranjas de Valencia lo más importante será intentar conservar todas sus propiedades y mantenerlas frescas el máximo tiempo posible.
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